El rol de TAC de calcio coronario y la prevención de enfermedad cardíaca
La preparación para un TAC de calcio coronario es mínima, lo que lo hace un procedimiento conveniente para muchos pacientes. Según sea su resultado, permiten a los profesionales de la salud recomendar cambios de estilo de vida o tratamientos adecuados para reducir el riesgo de enfermedad cardíaca.
El TAC de calcio coronario es un examen de alta complejidad, realizado usualmente en centros de imagenología avanzada, mide el calcio en las arterias coronarias para evaluar el riesgo de eventos cardíacos futuros. Al proporcionar un score de calcio coronario, permite a los médicos identificar la acumulación de calcio y ajustar tratamientos para prevenir la aterosclerosis, una causa principal de ataques cardíacos. Según expertos, médicos especialistas en cardiologías lo sugieren principalmente para aquellos en riesgo moderado, pacientes que no han tenido síntomas, pero poseen factores de riesgo como hipertensión o colesterol alto.
La tomografía computada para el cálculo del score de calcio coronario permite identificar y cuantificar calcificaciones antes de que se manifiesten síntomas de enfermedad cardíaca, facilitando intervenciones tempranas. Es una técnica de diagnóstico por imagen que, a diferencia de otros métodos más invasivos, ofrece una evaluación rápida y no invasiva de las coronarias.
La elección de un centro de imagenología avanzada es crucial para asegurar la precisión del TAC de calcio coronario. En Centro de Diagnóstico San Lorenzo, nuestra infraestructura se encuentra equipada con la tecnología más avanzada, un TAC de 128 canales con inteligencia artificial, y todo un personal calificado que garantizan la calidad y fiabilidad de los resultados, aspectos fundamentales para un diagnóstico y tratamiento adecuado que recomendará su médico de cabecera.
Según Mayo Clinic, el TAC de calcio coronario es particularmente útil para personas con riesgo intermedio de enfermedad cardíaca. Esto incluye a aquellos que tienen un historial familiar de enfermedad cardíaca, fumadores, personas con diabetes, presión arterial alta o colesterol alto. No está recomendado para personas con bajo riesgo o aquellos ya diagnosticados con enfermedad cardíaca severa, donde otras formas de evaluación podrían ser más apropiadas.